El alcalde de Castropol, Francisco Javier Vinjoy, quiere que el futuro dique fijo del puerto de Figueras sea “transitable” para vecinos y visitantes, que tenga alumbrado público y que pueda albergar una instalación de recreo y restauración en su parte más ancha. Estos objetivos fueron planteados ayer por el Regidor a la directora general de Infraestructuras Viarias y Portuarias del Principado, Esther Díaz, que visitó el concejo para abordar con Vinjoy la solución técnica para el nuevo dique figueirense. Su estudio de impacto ambiental se encuentra ahora en información pública, como paso previo a una inversión global que alcanzará los 3,6 millones de euros.

En el encuentro también se analizó el proyecto para la instalación de pantalanes flotantes en el puerto de Castropol, donde solo hay uno en temporada estival, aprovechando los fondos del plan de sostenibilidad turística de la comarca.

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Díaz confirmó al Alcalde que la principal obra en Figueras será la retirada del dique flotante y la construcción de uno nuevo, exterior y fijo, de 185 ,80 metros. Se garantizará así la seguridad de la dársena, donde aumentarán las plazas de amarre desde las 145 actuales hasta un total de 182.

El dique exterior, que tendrá dos alineaciones para adaptarse a la forma natural del canal de navegación, costará 1.130.350 euros y permitirá la completa protección de la dársena frente al oleaje. Además, está previsto demoler el muelle central para separar la zona de las embarcaciones deportivas de las pesqueras, que se reubicarán en un pantalán delante de los almacenes de pescadores. También se hará un dragado de toda la zona.