Todos los años por estas fechas, Marisefa y Ovidio aposentadores de este informático albergue, nos invitan a la reflexión y a compartir villancico en torno al belén parroquial. Semanas antes, con buen equipo de vecinos, han imaginado formas y, con esfuerzo, han ido acopiando y construyendo esta representación imaginativa de un momento importante en la historia humana que, para los cristianos, no es un sucedáneo de lo sucedido, sino un suceso de plena actualidad, no una foto rancia, sino un programa acuciante. Siempre es Navidad cuando alfombramos con responsable caridad el camino al que llega, cuando nos inclinamos ante el que nos necesita, cuando acertamos a no ser tan malos.
En el retablo colocamos, de modo un tanto disparatado, figuras de barro y sueños evanescentes, estrellas que señalan caminos y amaneceres que abren esperanza, montañas con frío y peces que beben en el río. Por aquí triscan ovejas y gallos que todo lo cacarean, camellos jorobados, burros rebeldes, mulos y vacas, sin pensamiento, rumiando el pienso.
Por el medio andamos nosotros, mujeres y hombres, reyes y plebeyos, pastores y soldados, labriegos y molineros, cocineras y lavanderas Trabajan unos, de tertulia andan otros, algunos van buscando y otros ya están de vuelta los niños con bufanda y pandereta y los viejos con tos y añoranza. Como la vida misma
En el portal de Belén hay estrellas, sol y luna, la Virgen y San José y el Niño que está en la cuna. Este es el Misterio Aquí está el epicentro.
¡Gracias!¡Enhorabuena! ¡Feliz Navidad y serena cuaresma! La bienaventuranza no depende del calendario.
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luis -
Todos los años por estas fechas, Marisefa y Ovidio aposentadores de este informático albergue, nos invitan a la reflexión y a compartir villancico en torno al belén parroquial. Semanas antes, con buen equipo de vecinos, han imaginado formas y, con esfuerzo, han ido acopiando y construyendo esta representación imaginativa de un momento importante en la historia humana que, para los cristianos, no es un sucedáneo de lo sucedido, sino un suceso de plena actualidad, no una foto rancia, sino un programa acuciante. Siempre es Navidad cuando alfombramos con responsable caridad el camino al que llega, cuando nos inclinamos ante el que nos necesita, cuando acertamos a no ser tan malos.
En el retablo colocamos, de modo un tanto disparatado, figuras de barro y sueños evanescentes, estrellas que señalan caminos y amaneceres que abren esperanza, montañas con frío y peces que beben en el río. Por aquí triscan ovejas y gallos que todo lo cacarean, camellos jorobados, burros rebeldes, mulos y vacas, sin pensamiento, rumiando el pienso.
Por el medio andamos nosotros, mujeres y hombres, reyes y plebeyos, pastores y soldados, labriegos y molineros, cocineras y lavanderas Trabajan unos, de tertulia andan otros, algunos van buscando y otros ya están de vuelta los niños con bufanda y pandereta y los viejos con tos y añoranza. Como la vida misma
En el portal de Belén hay estrellas, sol y luna, la Virgen y San José y el Niño que está en la cuna. Este es el Misterio Aquí está el epicentro.
¡Gracias!¡Enhorabuena! ¡Feliz Navidad y serena cuaresma! La bienaventuranza no depende del calendario.