Blogia
Castropol, Pueblo Ejemplar de Asturias

Otra carta de la Ría, de 1787

Otra carta de la Ría, de 1787

8 comentarios

Naniño o salcillo -

La historia es la historia pero la ría la vivimos más los de antes, Vegadeo,Seares, Vilavedelle,

San Juan , Castropol,Salias, Berbesa, A ligera ,Donlibun . Figueras, etc.


Por otra parte chamadelle eqis

Antonio Murias Vila -

Por lo que tengo leído, la historia del Condado de Ribadeo es de las más astracanadas. Descendientes del famoso Pierre le Bègue (o sea el Tartamudo) emparentaron después con los que serían nuevos titulares del Condado, los de Villandrando. Que yo sepa, el actual conde de Ribadeo es Alfonso Martínez de Irujo y Fitz-James Stuart, quien recibió el título de su madre, quien, además de ostentar un larguísimo rosario de títulos, se llamaba María del Rosario (ironías de la vida) Cayetana, aunque se la conocía por este último nombre, probablemente para evitar el remoquete.
Y coincido totalmente contigo, Luis, en que el autor de esta carta de la Ría se lo ha currado mucho más que los otros, cuyo trabajo consistió probablemente en calcar siluetas y poco más. Lástima que aquí no haya manera de leer nada de lo escrito, que es bastante por lo que se percibe.
También podríamos verificar si las coordenadas (latitud y longitud) toman como meridiano "0" el de París, o el de El Hierro, o el de Madrid. Hay que tener en cuenta que el de Greenwich no se adoptó hasta un siglo mas tarde, y que poco después de esta carta se efectuaron las mediciones del arco de meridiano terrestre, entre Dunkerque, París y Barcelona, que culminaron con la definición del metro. Esta carta del siglo de las Luces aparece en vísperas de la Revolución Francesa, lo que incrementa su interés histórico.

Luis L. Cotarelo -

El título de Condado de Ribadeo, en efecto, es uno de los centenares de títulos pertenecientes a la Casa de Alba, incluido alguno extranjero.
No tengo ni idea de los vericuetos por los que llegó ese título a la Casa de Alba, aunque me suena que formaba parte de alguna aportación de un matrimonio con algún apellido gallego
En cualquier caso, la calidad técnica de la carta deja en muy mal lugar a las cartas publicadas hace semanas, que son casi un cuarto de siglo posteriores.

Nano -

Voy proponer a unos para pasar a "raya" una pegs
tina que diga soy asturianin del Eo Pa lo como decía el " ministro,"

Nano -

Por otra parte para mí siempre será la ría del Eo de e Castropol de Vegadeo o de Figueras

Nano -

Gracias Antonio por tu ,creo buena detalla información, pero que serían los pueblos son realidades y pequeñas disputas.
Es más yo trabajé en Ribadeo y en este pueblo no me siento foráneo por no decir como en casa

Antonio Murias Vila -

Bueno, Nano, tampoco creo que hayamos de considerar ajeno el nombre de Ribadeo. No puede sernos extraño algo que en tiempos pasados fue propio. En la Alta Edad Media, el término con el que se designaba el territorio entre los ríos Navia (Albión) y Eo era sencillamente el de Tierra de Ribadeo, aplicándose a la ribera oriental, no a la occidental. Y así consta documentado cuando se reorganiza territorialmente, dando a luz el extensísimo “antiguo Concejo de Castropol”. Además, eclesiásticamente, se creó el Arcedianato de Ribadeo, más extenso todavía, llegando hasta lo que hoy son límites de la provincia de León, adentrándose hasta Pravia, y ocupando incluso territorio hoy gallego como Fonsagrada y Navia de Suarna. Y dentro de tal arcedianato, el arciprestazgo de Ribadeo, con sede en Castropol. Y estas instituciones territoriales, con algunas mutaciones, se han ido perpetuando hasta la configuración actual que no tiene más de un siglo. O sea que ante la Iglesia, a lo largo de casi un milenio, Ribadeo es lo que se halla en la ribera oriental del río Eo.
Otra cosa es la visión que, en el siglo XIV, tenía Enrique de Trastámara, que inventó y regaló el Condado de Ribadeo a un aventurero francés, de la campiña parisina y muy poco escrupuloso, llamado Pierre III de Villaines, llamado “el Tartamudo”, que lució el título de “comte de Ribedieux” (=literalmente “ribera de los dioses”) durante un breve periodo de tiempo, hasta que lo vendió a Rodrigo (Ruy) López Dávalos, condestable de Castilla que cayó en desgracia y perdió el título que revertió a la Corona y el Rey (entonces ya Juan II) lo volvió a conceder, en esta ocasión a Rodrigo de Villandrando. El tal Pierre el Tartamudo ostentaba otros títulos como el de Príncipe de Yvetot, etc, y era compañero de otro aventurero, éste bretón, artero y malcarado, Bertrand du Guesclin (sí, el de “ni quito ni pongo rey, pero ayudo a mi señor”, que por estos favores el agradecido Enrique otorgaba condados, privilegios y prebendas). Este condado siempre se ubicó, para gracia nuestra, en el margen occidental, o sea de la villa de Ribadeo, y si no estoy equivocado, pertenece actualmente a la Casa de Alba.


Nano -

La carta es de la ría ver siempre osea la del Robo la de ahora de Ribadeo?