De las pocas cosas buenas que tiene este país (que ciertamente tiene pocas), una es que se opina en todo momento, téngase o no conocimiento del asunto, en aras de una libertad de opinar que nos caracteriza, lo que nos une a los antiguos griegos, sin otros vicios de los antiguos griegos que nos suelen repugnar.
Con el ánimo constructivo que nos corresponde a quienes nos consideramos descendientes de los que supieron seguir tras el azul del mar el camino del sol, quiero decir tan sólo dos cosas:
Primera.- Que quienes hicieron posible la Biblioteca y quienes la conservaron supieron sobre todo dejar de lado sus variopintas tendencias políticas para trabajar conjuntamente en lo que sólo ha reportado beneficios a Castropol y su entorno, sacrificando muchas horas de su tiempo con un altruismo que merece el respeto de todos y la admiración de quienes compartimos una visión positiva y evolutiva de la realidad social, por encima de lo que es dado llamar "ideologías", término definitivamente caduco e inservible.
Segunda.- Que las empresas que superan el esfuerzo de un hombre y aúnan el de varios (como las asociaciones) en un interés común más o menos general, tienen afectado su patrimonio a tal destino (como las fundaciones, que no son en suma sino un patrimonio con personalidad jurídica), por lo que propiamente han de revertir en pro del fin u objeto pretendidos cuando los avatares históricos hagan zozobrar el futuro inmediato del ente. Quiero suponer que los fundadores de la Bibliotece de Castropol se sentirían conformes con el devenir de su obra. Lo demás son fruslerías. Y no quiero dejar pasar la ocasión -perdón por la incontinencia- de observar que las Cajas de Ahorro son entidades fundacionales (que históricamente han contado con privilegios como el beneficio de pobraza en los litigios -o sea la actual justicia gratuita-) y que de las manos de nuestros actuales gobernantes van a transformarse por arte de birlibirloque en patentes de corso para ejercer el negocio de la banca sin limitación y liberadas de la observancia de cualquier finalidad social, ni siquiera indirectamente.
Dicho lo anterior, que es lo que pretendía añadir al debate, barrunto que la tristeza que nos ha de embargar a todos, uniéndonos a las almas de los fundadores de la Biblioteca, es la menguada preparación cultural de los que actualmente tienen encomendada (via sufragio) la suprema misión de gobernar, y la (consiguiente) falta de principios de muchos de ellos (de cualqueir color y condición), con honrosas pero poco representativas excepciones. Y esto sí que es triste, porque implica una condena y supone un fracaso del que todos, sin excepción, somos victimas.
Victor de Primote -
En respuesta a mi buen amigo Luis Legaspi. Respecto a la primera pregunta que lanze. La gestión propiamente bibliotecaria, aunque loable por su buena intención, dejo mucho, mucho que desear. La Biblioteconomia no se limita, unicamente, a poner a una persona que lleve el registro de los libros prestados, y mantenga el orden en la Biblioteca. El personal bibliotecario tiene entre sus funciónes no solo la gestión sino la dinamización de su Biblioteca: es decir, tiene que buscar a sus lectores fuera de esas cuatro paredes y de esas estanterias en la que estan colocados los libros. Y eso, a mi entender persigue la ruta literaria que Manuela Busto propuso a proposito de la visita de Luis Cernuda con las Misiones Pedagogicas en 1935(lo cual demuestra la falta de criterio y de desconocimiento de Robaliza). La historia posterior a 1936 de la Biblioteca Popular Circulante de Castropol es ciertamente trite. Como bien dice Luis Legaspi fue incautada por los acolitos a la dictadura franquista, y si, reabierta en 1945... ¿No sera casualidad que esa apertura de la Biblioteca venga dada por el obligado cambio de rumbo tras la derrota de los paises del Eje y el terror a una invasión por los Pirineos? Y en 1945... cuando todavia se estaba con las tristes cartas de racionamiento. Bueno, eso es otra Historia. Y los profesionales de la Historia tienen mucho que decir al respecto. Yo no creo que la gestión y dinamización de la Biblioteca se vea mediatizada más que por el dinero que se le conceda para su desarrollo. No digo que los politicos no quieran controlar la cultura, pero con que fin se quiere recuperar a manos privadas una biblioteca?¿Acaso las personas que forman una Sociedad, una Asociación o cualquier tipo de agrupación no tienen una ideologia más o menos definida? Decir que no tienen una ideologia es mentir. Creo que la gestión de la Biblioteca de Castropol, junto con la de Vegadeo ha sido no buena, sino excelente y ejemplar. Han dinamizado la cultura de los dos Concejos de una manera que otros Concejos vecinos tardaron en alcanzar. El apoyo economico proporcionado por el Principado y el Ayuntamiento a facilitado su labor, o la ha dificultado en determinadas épocas(como sucedio bajo el gobierno de URAS). Lo que tengo claro es que la privatización de la Biblioteca no traeria nada bueno: solo disputas de chigre (como suele ser frecuente en Castropol) que acaban por dejar los campos fertiles en eriales en los que no crece nada. Yo invito a todos los que lean estas palabras a que se pasen por la Biblioteca de Castropol, y hagan uso de sus multiples y desconocidos servicios... para criticar por criticar. ¡Qué esto no es un chigre!
legaspi -
MI CUARTO A ESPADAS
Creo positivo que el diálogo progrese, aunque sea entre tierna y difusa niebla. No me gusta tanto dialogar entre confusas y tenebrosas tinieblas. Castropol todavía no es San Tiniebla, sino Santiniebla. Este es el origen de mi comentario anterior. Robaliza apoyándose en la crónica de La Nueva España lo enfoca, según su criterio y con toda legitimidad, sobre el tema la acción y situación de la Biblioteca, bien apreciada por todo castropolense que se precie, como es el caso de Victor Díaz, licenciado en Historia y experto bibliotecario que hace preguntas Yo, por él estimulado, vuelvo al albero con mi capote, pero sin estoque ni afán de descabello.
¿A caso la Biblioteca no fue bien gestionada hasta el día de hoy? Pues sí, razonablemente bien. No es demostrable que en otras circunstancias las cosas hubiesen sido peor. Hay que agradecer a doña Manuela Busto actual bibliotecaria su muy buena labor hecha con inteligente dedicación. Creo que a ella le gustaría llegar a metas más altas. Tiene vocación y todo es perfectible.
¿No se han retomado proyectos que el grupo de Vicente Loriente puso en funcionamiento en sus comienzos?. Sin duda. En la mayor parte de la Dictadura y en los primeros tiempos de la nueva Democracia, la Biblioteca, con pequeños retoques impuestos y sin impuestos económicos trató de continuar.
Los fundadores supervivientes y otras personas colaboradores y amigos liberales de la Biblioteca Popular Circulante arropando a don Vicente Loriente Cancio no renunciarían de buen grado a que la incautación hecha en el régimen franquista se consolidase y, poco a poco con temor y cautela fueron abriendo camino de restauración.
En octubre de 1945 se reabre al público bajo el control del Centro Coordinador de Bibliotecas, bien trufado por gente liberal y aún con identidad y competencias in fieri. El Ayuntamiento, por su parte, con la finalidad precisa de albergar la Biblioteca adquiere el edificio número 3 de la calle Penzol Lavandera, propiedad de la familia García Paredes bien vinculada en su fundación a la Bepecé.
A partir de 1950 se fueron reanudando actos culturales que no enojasen los principios vigentes. Hasta 1982 alcanzaron varias decenas, sin desmerecer de la época anterior ni ser superados en las últimas décadas.
Victor dice literalmente: pero es de tontos queres que una biblioteca como la de Castropol vuelva a manos privadas, para no poder sostenerla económicamente
Parece de tontos pensar que una asociación de derecho público está en manos privadas de control público. Sería como una contraditio in terminis. Además, no sólo de pan vive el hombre, el honor es patrimonio del alma y más vale morir de pie etc.etc..
La Administración política de un estado civil moderno y progresista, no orweliano, tiene el deber de promocionar, vigilar, proteger e, incluso, subvencionar asociaciones y fundaciones culturales, benéficas, deportivas, educativas, religiosas Es un derecho de libertad personal y social. Es una forma de riqueza, para el Estado que ahorra dinero y amplía el abanico de iniciativas creadoras y fomenta la responsabilidad social de los individuos. Sólo los irracionales se apañan con el pienso en el pesebre.
Así nació la Bepecé al que el Ayuntamiento de Castropol prestó algunas ayudas y bastantes restricciones como anular y prescindir de socios voluntarios y juntas constituidas legítimamente. Tal sucedió en el 36 y se repitió en el 80 y algo.
Por cierto estas juntas eran representativas de vecinos. A modo de ejemplo, véase la última refrendada por el Patronato Provincial de Bibliotecas en 1982: Domingo Martínez, Luis Legaspi, Ovidio Vila Pernas, Carmen Murias Travieso, Mª Antonia Afonso, Blanca García Herrero, Marisefa Díaz-Canel, Victor Díaz Mesa, José María Llenderrozos, Vicente Loriente Penzol, Rafael García Monteavaro, Antonino Esteban Quintana, José Guzmán Méndez, Fernando Díaz Fernández.
Esta Junta y un muy largo centenar de socios, por el Ayuntamiento marginados, con fondos de socios, subvenciones de organismos públicos e instituciones privadas, personas particulares y trabajos voluntarios etcétera han realizado obras importantes de acomodación del edificio (saneamiento de humedades, saloncillo de actos con su mobiliario, servicios higiénicos, escalera interior, almacén de libros, adquisición de libros, material audiovisual, lámparas de techo extensibles sobre las mesas ) todo por un valor superior a dos millones de pesetas.
Tras citar a la última Junta de la Biblioteca en la capital del concejo, no me perdonaría que se me quedase en el tintero la nunca renovadas Juntas de las bibliotecas sucursales-hermanas del concejo, para sustituir a personas beneméritas como Angelito Pérez, de Barres; Domingo de Brasón, Juan da Fraila y los de Rita, de Piñeira: el Govelo del Valin; Sela y Cereixeira, en Vilavedelle; Bustelo, y Talín de San Juan; Acevedo, Fidalgo y Guerra en Figueiras, José María López y Ramón González en Seares y muchos etcéteras que no recuerdo en Paleiras, La Roda, El Valle, Balmonte, Añides esto no le mejora hoy ninguna biblioteca municipal, que yo sepa.
No es verdad que necesitemos del Nacionalsocialismo ni del Nacionalcatolicismo Los ismos más bien lo estropean todo. Ejemplos bien recientes tenemos. Y, ahora, hasta privatizan la popular Lotería Nacional. ¡A lo que llegamos!
La Administración Pública no es nuestro Patrón, es nuestro servicio. ¡De Ayuntamiento, lo justo. Sociedad, toda la posible!
Y para terminar parodio al buen amigo Victor: Esto no es un sueño de Quijotes, señores
Victor de Primote -
¿A caso la Biblioteca no fue bien gestionada hasta el dia de hoy? ¿No se han retomado proyectos que el grupo de Vicente Loriente puso en funcionamiento en sus comienzos? Probablemente estuvo mal hecho el transito de Biblioteca Popular a Biblioteca Publica, pero es de tontos queres que una biblioteca como la de Castropol vuelva a manos privadas, para no poder sostenerla economicamente: al fin y al cabo, en el Concejo apenas quedan 3.500 habitantes de los 5100 que habia en torno a los 90. La pagan todos los castropolenses, no solo los de la villa, y con su privatización los de la parroquia de Castropol tendrian que sostenerla solos. Yo también querria que Castropol volviese a ser la capital de todas las tierras entre el Eo y el Navia... pero eso es sueño de Quijotes, señores.
luis -
Me alegra que todavía haya robalizas "salvajes" y libres en la Ría del Eo. No todos vamos a ser peixe de cultivo en piscinas controladas.
ROBALIZA -
INCREIBLE que vengan ahora estas bibliotecarias con estAS CHORRADAS. la biblioteca popular de CASTROPOL fue usurpada al pueblo de CASTROPOL por el ayuntamuiento y el principado de asturias,y DEBES SER DEVUELTA a sus socios los ,unicos y legítiMOS dueños de la BPCC. SALUDOS
ROBALIZA -
INCREIBLE que vengan ahora estos bibliotecarios con estAS CHORRADAS. la biblioteca popular de CASTROPOL fue usurpada al pueblo de CASTROPOL por el ayuntamuiento y el principado de asturias,y DEBES SER DEVUELTA a sus socios los ,unicos y legítiMOS dueños de la BPCC. SALUDOS
legaspi -
SANTA NIEBLA
Niebla y tiniebla tienen concomitancas en su etimología. Pero el poeta al resumir su recuerdo castropolense busca otro matiz menos tenebroso: Santi Niebla. Cernuda Bidón con su pareja misionera, Prieto Anguita se hospedaron efectivamente en el Hotel Guerra en donde eran pupilos habituales los curas de Castropol. No se conoce ningún desencuentro personal entre los misioneros laicos y los religiosos, pero si queda testimonio de que los curas percibieron un cierto olor sulfúrico. Acaso Cernuda tuvo la sensación de navegar entre nieblas de sancristía, aunque la bruma meteorológica tampoco falte en el Eo.
El oficio de tinieblas era ceremonia del viernes santo. Os nenos estábamos ansiosos de apagar, a ritmo lento de salmodia, todas las candelas hasta que quedaba la última LUZ en la cúspide del tenebrario, entonces se extendían las tinieblas y estallaba el estruendo de las carracas. A continuación, la procesión del santo entierro.
Hoy el ritmo es de nana arrulladora. Es Navidad. ¡Felicidades!
8 comentarios
Antonio Murias Vila -
Con el ánimo constructivo que nos corresponde a quienes nos consideramos descendientes de los que supieron seguir tras el azul del mar el camino del sol, quiero decir tan sólo dos cosas:
Primera.- Que quienes hicieron posible la Biblioteca y quienes la conservaron supieron sobre todo dejar de lado sus variopintas tendencias políticas para trabajar conjuntamente en lo que sólo ha reportado beneficios a Castropol y su entorno, sacrificando muchas horas de su tiempo con un altruismo que merece el respeto de todos y la admiración de quienes compartimos una visión positiva y evolutiva de la realidad social, por encima de lo que es dado llamar "ideologías", término definitivamente caduco e inservible.
Segunda.- Que las empresas que superan el esfuerzo de un hombre y aúnan el de varios (como las asociaciones) en un interés común más o menos general, tienen afectado su patrimonio a tal destino (como las fundaciones, que no son en suma sino un patrimonio con personalidad jurídica), por lo que propiamente han de revertir en pro del fin u objeto pretendidos cuando los avatares históricos hagan zozobrar el futuro inmediato del ente. Quiero suponer que los fundadores de la Bibliotece de Castropol se sentirían conformes con el devenir de su obra. Lo demás son fruslerías. Y no quiero dejar pasar la ocasión -perdón por la incontinencia- de observar que las Cajas de Ahorro son entidades fundacionales (que históricamente han contado con privilegios como el beneficio de pobraza en los litigios -o sea la actual justicia gratuita-) y que de las manos de nuestros actuales gobernantes van a transformarse por arte de birlibirloque en patentes de corso para ejercer el negocio de la banca sin limitación y liberadas de la observancia de cualquier finalidad social, ni siquiera indirectamente.
Dicho lo anterior, que es lo que pretendía añadir al debate, barrunto que la tristeza que nos ha de embargar a todos, uniéndonos a las almas de los fundadores de la Biblioteca, es la menguada preparación cultural de los que actualmente tienen encomendada (via sufragio) la suprema misión de gobernar, y la (consiguiente) falta de principios de muchos de ellos (de cualqueir color y condición), con honrosas pero poco representativas excepciones. Y esto sí que es triste, porque implica una condena y supone un fracaso del que todos, sin excepción, somos victimas.
Victor de Primote -
Respecto a la primera pregunta que lanze. La gestión propiamente bibliotecaria, aunque loable por su buena intención, dejo mucho, mucho que desear. La Biblioteconomia no se limita, unicamente, a poner a una persona que lleve el registro de los libros prestados, y mantenga el orden en la Biblioteca. El personal bibliotecario tiene entre sus funciónes no solo la gestión sino la dinamización de su Biblioteca: es decir, tiene que buscar a sus lectores fuera de esas cuatro paredes y de esas estanterias en la que estan colocados los libros. Y eso, a mi entender persigue la ruta literaria que Manuela Busto propuso a proposito de la visita de Luis Cernuda con las Misiones Pedagogicas en 1935(lo cual demuestra la falta de criterio y de desconocimiento de Robaliza).
La historia posterior a 1936 de la Biblioteca Popular Circulante de Castropol es ciertamente trite. Como bien dice Luis Legaspi fue incautada por los acolitos a la dictadura franquista, y si, reabierta en 1945... ¿No sera casualidad que esa apertura de la Biblioteca venga dada por el obligado cambio de rumbo tras la derrota de los paises del Eje y el terror a una invasión por los Pirineos? Y en 1945... cuando todavia se estaba con las tristes cartas de racionamiento. Bueno, eso es otra Historia. Y los profesionales de la Historia tienen mucho que decir al respecto.
Yo no creo que la gestión y dinamización de la Biblioteca se vea mediatizada más que por el dinero que se le conceda para su desarrollo. No digo que los politicos no quieran controlar la cultura, pero con que fin se quiere recuperar a manos privadas una biblioteca?¿Acaso las personas que forman una Sociedad, una Asociación o cualquier tipo de agrupación no tienen una ideologia más o menos definida? Decir que no tienen una ideologia es mentir.
Creo que la gestión de la Biblioteca de Castropol, junto con la de Vegadeo ha sido no buena, sino excelente y ejemplar. Han dinamizado la cultura de los dos Concejos de una manera que otros Concejos vecinos tardaron en alcanzar.
El apoyo economico proporcionado por el Principado y el Ayuntamiento a facilitado su labor, o la ha dificultado en determinadas épocas(como sucedio bajo el gobierno de URAS).
Lo que tengo claro es que la privatización de la Biblioteca no traeria nada bueno: solo disputas de chigre (como suele ser frecuente en Castropol) que acaban por dejar los campos fertiles en eriales en los que no crece nada.
Yo invito a todos los que lean estas palabras a que se pasen por la Biblioteca de Castropol, y hagan uso de sus multiples y desconocidos servicios... para criticar por criticar. ¡Qué esto no es un chigre!
legaspi -
Creo positivo que el diálogo progrese, aunque sea entre tierna y difusa niebla. No me gusta tanto dialogar entre confusas y tenebrosas tinieblas. Castropol todavía no es San Tiniebla, sino Santiniebla. Este es el origen de mi comentario anterior. Robaliza apoyándose en la crónica de La Nueva España lo enfoca, según su criterio y con toda legitimidad, sobre el tema la acción y situación de la Biblioteca, bien apreciada por todo castropolense que se precie, como es el caso de Victor Díaz, licenciado en Historia y experto bibliotecario que hace preguntas Yo, por él estimulado, vuelvo al albero con mi capote, pero sin estoque ni afán de descabello.
¿A caso la Biblioteca no fue bien gestionada hasta el día de hoy?
Pues sí, razonablemente bien. No es demostrable que en otras circunstancias las cosas hubiesen sido peor. Hay que agradecer a doña Manuela Busto actual bibliotecaria su muy buena labor hecha con inteligente dedicación. Creo que a ella le gustaría llegar a metas más altas. Tiene vocación y todo es perfectible.
¿No se han retomado proyectos que el grupo de Vicente Loriente puso en funcionamiento en sus comienzos?. Sin duda. En la mayor parte de la Dictadura y en los primeros tiempos de la nueva Democracia, la Biblioteca, con pequeños retoques impuestos y sin impuestos económicos trató de continuar.
Los fundadores supervivientes y otras personas colaboradores y amigos liberales de la Biblioteca Popular Circulante arropando a don Vicente Loriente Cancio no renunciarían de buen grado a que la incautación hecha en el régimen franquista se consolidase y, poco a poco con temor y cautela fueron abriendo camino de restauración.
En octubre de 1945 se reabre al público bajo el control del Centro Coordinador de Bibliotecas, bien trufado por gente liberal y aún con identidad y competencias in fieri. El Ayuntamiento, por su parte, con la finalidad precisa de albergar la Biblioteca adquiere el edificio número 3 de la calle Penzol Lavandera, propiedad de la familia García Paredes bien vinculada en su fundación a la Bepecé.
A partir de 1950 se fueron reanudando actos culturales que no enojasen los principios vigentes. Hasta 1982 alcanzaron varias decenas, sin desmerecer de la época anterior ni ser superados en las últimas décadas.
Victor dice literalmente: pero es de tontos queres que una biblioteca como la de Castropol vuelva a manos privadas, para no poder sostenerla económicamente
Parece de tontos pensar que una asociación de derecho público está en manos privadas de control público. Sería como una contraditio in terminis. Además, no sólo de pan vive el hombre, el honor es patrimonio del alma y más vale morir de pie etc.etc..
La Administración política de un estado civil moderno y progresista, no orweliano, tiene el deber de promocionar, vigilar, proteger e, incluso, subvencionar asociaciones y fundaciones culturales, benéficas, deportivas, educativas, religiosas Es un derecho de libertad personal y social. Es una forma de riqueza, para el Estado que ahorra dinero y amplía el abanico de iniciativas creadoras y fomenta la responsabilidad social de los individuos. Sólo los irracionales se apañan con el pienso en el pesebre.
Así nació la Bepecé al que el Ayuntamiento de Castropol prestó algunas ayudas y bastantes restricciones como anular y prescindir de socios voluntarios y juntas constituidas legítimamente. Tal sucedió en el 36 y se repitió en el 80 y algo.
Por cierto estas juntas eran representativas de vecinos. A modo de ejemplo, véase la última refrendada por el Patronato Provincial de Bibliotecas en 1982: Domingo Martínez, Luis Legaspi, Ovidio Vila Pernas, Carmen Murias Travieso, Mª Antonia Afonso, Blanca García Herrero, Marisefa Díaz-Canel, Victor Díaz Mesa, José María Llenderrozos, Vicente Loriente Penzol, Rafael García Monteavaro, Antonino Esteban Quintana, José Guzmán Méndez, Fernando Díaz Fernández.
Esta Junta y un muy largo centenar de socios, por el Ayuntamiento marginados, con fondos de socios, subvenciones de organismos públicos e instituciones privadas, personas particulares y trabajos voluntarios etcétera han realizado obras importantes de acomodación del edificio (saneamiento de humedades, saloncillo de actos con su mobiliario, servicios higiénicos, escalera interior, almacén de libros, adquisición de libros, material audiovisual, lámparas de techo extensibles sobre las mesas ) todo por un valor superior a dos millones de pesetas.
Tras citar a la última Junta de la Biblioteca en la capital del concejo, no me perdonaría que se me quedase en el tintero la nunca renovadas Juntas de las bibliotecas sucursales-hermanas
del concejo, para sustituir a personas beneméritas como Angelito Pérez, de Barres; Domingo de Brasón, Juan da Fraila y los de Rita, de Piñeira: el Govelo del Valin; Sela y Cereixeira, en Vilavedelle; Bustelo, y Talín de San Juan; Acevedo, Fidalgo y Guerra en Figueiras, José María López y Ramón González en Seares y muchos etcéteras que no recuerdo en Paleiras, La Roda, El Valle, Balmonte, Añides esto no le mejora hoy ninguna biblioteca municipal, que yo sepa.
No es verdad que necesitemos del Nacionalsocialismo ni del Nacionalcatolicismo Los ismos más bien lo estropean todo. Ejemplos bien recientes tenemos. Y, ahora, hasta privatizan la popular Lotería Nacional. ¡A lo que llegamos!
La Administración Pública no es nuestro Patrón, es nuestro servicio. ¡De Ayuntamiento, lo justo. Sociedad, toda la posible!
Y para terminar parodio al buen amigo Victor: Esto no es un sueño de Quijotes, señores
Victor de Primote -
Probablemente estuvo mal hecho el transito de Biblioteca Popular a Biblioteca Publica, pero es de tontos queres que una biblioteca como la de Castropol vuelva a manos privadas, para no poder sostenerla economicamente: al fin y al cabo, en el Concejo apenas quedan 3.500 habitantes de los 5100 que habia en torno a los 90. La pagan todos los castropolenses, no solo los de la villa, y con su privatización los de la parroquia de Castropol tendrian que sostenerla solos.
Yo también querria que Castropol volviese a ser la capital de todas las tierras entre el Eo y el Navia... pero eso es sueño de Quijotes, señores.
luis -
ROBALIZA -
SALUDOS
ROBALIZA -
SALUDOS
legaspi -
Niebla y tiniebla tienen concomitancas en su etimología. Pero el poeta al resumir su recuerdo castropolense busca otro matiz menos tenebroso: Santi Niebla. Cernuda Bidón con su pareja misionera, Prieto Anguita se hospedaron efectivamente en el Hotel Guerra en donde eran pupilos habituales los curas de Castropol. No se conoce ningún desencuentro personal entre los misioneros laicos y los religiosos, pero si queda testimonio de que los curas percibieron un cierto olor sulfúrico. Acaso Cernuda tuvo la sensación de navegar entre nieblas de sancristía, aunque la bruma meteorológica tampoco falte en el Eo.
El oficio de tinieblas era ceremonia del viernes santo. Os nenos estábamos ansiosos de apagar, a ritmo lento de salmodia, todas las candelas hasta que quedaba la última LUZ en la cúspide del tenebrario, entonces se extendían las tinieblas y estallaba el estruendo de las carracas. A continuación, la procesión del santo entierro.
Hoy el ritmo es de nana arrulladora. Es Navidad. ¡Felicidades!