En el día de su Primera Comunión, un grupo de alfombristas de Castropol han confeccionado esta alfombra para los niños que la celebraban.
Queremos agradecer sus comentarios a todos y también a El Pampillo, así como a todos los que han publicado en su muro de Facebook la foto de nuestra alfombra.
3 comentarios
Antonio Murias Vila -
Y la Iglesia permanece, por esencia y por devoción, con los brazos abiertos. Son legión los "comecuras" que, al ver próximo el fin de su tránsito por la vida terrenal, solicitaron ser confortados por quienes otrora habían sido víctimas de sus ofensas (las más de las veces, sólo verbales, pero también de otra guisa y delito). Y que dicho último consuelo se llevase a cabo con la pompa (discreta, eso sí) de la unción de enfermos, antes llamada extrema unción. Muchos de los que en su día se habían burlado de los óleos y otras prácticas, las suplicaron para sí en sus últimos momentos.
Uno puede tener las opiniones que guste afectar, y exponerlas en absoluta libertad. Pero sin ofender. Y un gesto bonito y enrañable como el de esta alfombra con ocasión de un acto como la primera comunión de unos niños, no debería servir de palanca o trampolín para verter innecesria bilis que demasiado pronto nos puede lleart al límite del amplio tipo del artículo 510 CP.
Y en cuanto al "folklore", como conjunto de costumbres, tradiciones y manifestaciones artísticas de un pueblo, no hace falta decir que merecen la atención, cuidados y mimo de las autoridades (cfr. arts. 8 y 10-18 y 20 del Estatuto del Principado de Asturias)... y su protección, incluso cuando son espontáneas.
Nano -
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¿ Por qué la iglesia CAR sabiendo que no le van volver estos niños y niñas toleran su folklore?
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